Mujeres con historia: Gerda Taro brillando a la sombra de Capa

Gracias a la novela gráfica de Pénélope Bagieu

Valerosas 1, pensé que debía tratar la temática de las mujeres en la historia. Sobre todo, porque la historia por norma general ha sido escrita en género masculino y salvo alguna exepción la mujer ha sido relegada a madre de o esposa de. No obstante es bien sabido que existen numerosas mujeres importantes para la historia que muchas veces fueron eclipsadas por una figura masculina. Por ello hoy nace la sección Mujeres con historia, donde repasaré la vida de mujeres importantes en la historia, ya sea por su labor profesional, por su ideología o por su influencia. Y para comenzar he elegido una mujer que siempre estuvo a la sombra de su pareja, pero que sin duda lo dio todo por el legado que nos dejó, sus fotografías de la guerra civil española. Se trata de Gerda Taro.

La carrera de Gerda Taro en la fotografía es muy corta, apenas poco más de un año, pero sin duda es digna de mención. Pues su importancia histórica y por tratarse de una mujer que se enfrascaba en el peligroso trabajo de la fotografía de guerra. Nació en Stuttgart en Alemania el 1 de Agosto de 1910, en una familia judía con procedencia polaca. Por ello no es de extrañar que con la llegada de Hitler al poder su vida sufriera un cambio. Su ideología muy cercana a los movimientos socialistas la pusieron en el punto de mira provocando su huida hacia París en 1933 tras haber sufrido una detención.

Al año siguiente, en septiembre de 1934, es cuando conoce al joven fotógrafo André Friedman. Este fotógrafo judío de origen húngaro sería el responsable de que la señorita Taro se interesara por la fotografía, y es que André Friedman no es otro más que el que luego conoceríamos como Robert Capa. En 1935 se van a vivir juntos y Gerda se inicia en el mundo de la fotografía bajo las enseñanzas de Friedman. Sin duda fue una aplicada alumna que pronto destacó, por lo que pronto consiguió un empleo como asistente en Alliande Photo y en 1936 ya la acreditarán como fotoperiodista la agencia holandesa ABC Press-Service.

Gerda y André querían destacar en la fotografía y para ello se les ocurrió crear lo que hoy denominaríamos una marca, naciendo el nombre de Robert Capa. En un principio las obras de uno y otro se firmaban bajo este seudónimo, pero con el tiempo André pasaría a ser Capa y Gerda simplemente cambiaría su apellido a Taro, diferenciando ya sus trabajos con nombres distintos.

Su primer viaje a España fue junto a Capa en agosto de 1936, cuando estalla la Guerra Civil Española y se trasladan a Barcelona para cubrir la lucha. Como ya os comentaba, sus primeros reportajes van junto a los de Capa bajo la misma firma, ambos fotografiaban los mismos lugares y situaciones, aunque por supuesto cada uno en su estilo. Gracias precisamente a las diferencias hoy podemos identificar algunas imágenes como obra de Tardo puesto que utilizaban cámaras de diferente formato. Robert Capa utilizaba una Leica (formato rectangular) y Gerda Tardo una Rolleiflex (formato cuadrado).

Es a partir de 1937 cuando Gerda empieza a identificarse como autora independiente de su pareja. Ya realizan trabajos en lugares diferentes y ocasiones distintas y vuelven a reencontrarse en París en varias ocasiones. Aunque sería precisamente en 1937, en la celebración de la Toma de la Bastilla, cuando se encontraron por última vez.

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"...todo en ella es política. Su vida, su comportamiento, sus fotos. Política en el sentido más amplio y más justo, que es sentirse concernido por su tiempo. De vivirse como sujeto y no sólo como objeto. Sujeto de la Historia y sujeto de su propia historia" François Maspero - La sombra de una fotógrafa

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Gerda Taro en el frente de Brunete. La foto está hecha por Capa

Su regreso a España acompañada por el periodista canadiense Ted Allan sería su último trabajo. Regresó a Brunete para cubrir la retirada del ejército republicano. Por ello el domingo 25 de julio, tanto Gerda como Allan se vieron inmersos en pleno bombardeo, Gerda no dejó de hacer fotografías en ningún momento subida al estribo del coche del general Walter. Durante la retirada, uno de los tanques republicanos perdió el control e impactó contra el vehículo del general, llevando en el impacto a la fotógrafa. Fué herida de gravedad y aunque la trasladaron al hospital inglés El Goloso en El Escorial, fallecería al día siguiente.

Noticia en prensa sobre la muerte de Gerda Taro

Su traslado a París fué acompañado del escritor Paul Nizan y obtuvo un funeral multitudinario organizado por el partido Comunista Francés, convirtiéndola en una heroína. Muchos acompañaron sus restos a su lugar de reposo, el cementerio parisino de Père-Lachaise, entre los que se encontraron Chim Seymour, Ted Allan y Robert Capa. Este último tras la muerte de Taro, no volvería a rememorar su recuerdo salvo en la dedicatoria de su recopilatorio fotográfico, Death in Making.

Dedicatoria da Robert Capa a Gera Taro

La figura de Gerda Taro se iría desvaneciendo con el tiempo y con el éxito de Robert Capa, que eclipsaría el trabajo de la fotógrafa en la Guerra Civil Española, quedando casi en el olvido. No obstante, sería el biógrafo de Capa, Richard Whelan, el que pondría el primer granito de arena para el resurgir de la figura de Gerda Tardo, reconociendo la presencia y autonomía de esta en la biografía publicada en 1985 del célebre fotógrafo.

Sin embargo sería la alemana Irme Schaber la que en 1994 publicase un libro que alimentase el interés en esta fotógrafa, Gerda Taro. Una fotógrafa revolucionaria en la guerra de España. Pero además Irme Schaber continuará su labor devolviendola a Tardo a la celebridad, trabajando en la exposición que organizó el Internacional Center of Photography (ICP) de Nueva York, siendo comisaria junto a Richard Whelan y Kristen Lubben.

Camilleros republicanos en el puerto de Navacerrada, Gerda Taro, 1937

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“ Como muy bien planteó Irme Schaber ... su figura es un ejemplo visible de cómo la historia de las mujeres se ha visto generalmente desdibujada y ocultada, hasta el punto de que los tres motivos fundamentales por los que Taro fue tomada en consideración eran: haber vivido y trabajado con un hombre famoso, ser atractiva y la tragedia de su muerte. Tres elementos que no han hecho sino dificultar una apreciación equilibrada de lo que simbolizó y representó su trabajo como reportera en la Guerra Civil” Alberto Martíín- Las imagenes heridas de Gerda Taro - El País “

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Soldados republicanos, batalla de Brunete, Gerda Taro, 1937

Gerda Taro es sin duda un referente del papel de la mujer en el fotoperiodismo bélico, arriesgando su vida para conseguir dejar plasmada en imágenes la realidad de estos duros momentos. Por ello es muy merecido el protagonismo que desde los noventa ha ido recuperando frente a Capa (otro gran fotógrafo que dejó si vida también en otra guerra). Un papel el de la mujer que siempre se ha visto a la sombra en la historia si lo comparamos con las referencia masculinas. Lo ideal sería no necesitar reivindicar el papel de una mujer, sino que la historia tuviera el mismo lugar para todos indiferentemente del género. Pero sin duda nos queda mucho para llegar a la igualdad de representación histórica, por ello es tan importante seguir difundiendo el papel de estas mujeres que se lanzaron a un mundo sobre todo masculino y que sembraron el camino que hoy muchas podemos disfrutar y sobre todo que debemos seguir cuidando para que no vuelva a desaparecer.

Pero no quería terminar este repaso al trabajo fotográfico de Taro, un trabajo que representa la Guerra Civil Española, sin deciros que para nada fué la única mujer que plasmó en imágenes esta época. Por ello quiero compartir a continuación una serie de referencias a otras mujeres en la guerra civil.